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e habla todo el tiempo de la importancia de cuidar la salud del cuerpo: velar la alimentación, procurar el descanso adecuado, hacer actividad física, evitar el uso o abuso de sustancias dañinas, mantener medidas de higiene. Cuando se trata de salud mental, es otra la historia. De ordinario no se piensa en proteger la salud mental cuando se habla de salud preventiva. Persiste en muchos ámbitos la noción de que solamente deben procurar ayuda quienes enfrentan un desorden mental agudo.
Los múltiples roles que desempeñamos en la sociedad actual, la multiplicidad de estímulos a los que nos expone la tecnología, y las complejidades de la vida moderna apuntan a que el cuidado mental continuo puede ser una de nuestras necesidades más apremiantes. Teniendo eso en cuenta, se le preguntó a la doctora Vanessa Rivera, psicóloga clínica y directora interina de la Clínica de la Universidad Albizu, acerca de la importancia de vencer el tabú y de revisar regularmente nuestra salud mental.
¿Por qué necesitamos terapia?
La vida diaria está llena de situaciones que podemos resolver fácilmente. Sin embargo, puede haber algunas situaciones que empiecen a requerir de la persona un esfuerzo mayor para manejarlas. Cuando en el día a día las preocupaciones, toma de decisiones, las relaciones interpersonales, el trabajo, la familia y hasta considerar la posibilidad de tomarnos un tiempo libre nos causa inquietud constante, abrumadora o incapacitante, debemos considerar apoyarnos con ayuda psicológica o tratamiento. Es momento de procurar ese cuidado cuando aquello que antes podíamos solucionar casi sin pensarlo nos empieza a causar dificultad.
¿Cuáles son señales que indican que se debe buscar ayuda profesional de salud mental?
Para identificar si es recomendable buscar ayuda de salud mental se deben observar cambios en el comportamiento o en la forma de reaccionar ante determinadas situaciones. Señales a las que debemos prestar atención pueden ser cuando se producen cambios en aquellas actividades que la persona antes disfrutaba, y que de momento le son indiferentes. Se pueden observar cambios en los patrones de sueño (que pueden ir desde dormir más de lo acostumbrado hasta dificultad o incapacidad para alcanzar sueño profundo) y cambios en la alimentación. Hay que ver si la persona siente que su estado de ánimo está comprometido, si tiene problemas para tomar decisiones o falta de concentración. Todas esas son indicaciones a considerar porque pueden ser señales de que hay necesidad de recibir servicios de salud mental.
Hay cierta percepción de que necesitar ayuda psicológica implica debilidad de carácter, inmadurez o incapacidad de lidiar con las situaciones normales de la vida en sociedad. ¿Qué se le puede decir a los que piensan de esa forma?
En lugar de ser una señal de debilidad, buscar ayuda en el área de salud mental es una fortaleza. Significa que valoramos nuestro bienestar emocional como una prioridad en nuestra vida. La psicoterapia ofrece la oportunidad de que las personas puedan tener estrategias dirigidas al manejo del estrés y toma de decisiones. Esto contribuye al bienestar emocional y permite un mejor desarrollo de las diferentes relaciones interpersonales. Eso a su vez propende a lograr una aportación más valiosa a nuestra sociedad, en la medida en que hace posible una interacción más efectiva con las personas alrededor. La decisión de buscar ayuda es personal, pero demuestra compromiso con uno mismo y con los que nos rodean, por lo que está muy lejos de ser una muestra de debilidad o incapacidad. Se demuestra fortaleza al reconocer que se necesita apoyo y ayuda psicológica. Demuestra también que la persona tiene la capacidad de comprometerse a procurar un espacio para su crecimiento.
¿Por qué es recomendable adoptar prácticas para revisar y cuidar la salud mental?
En los servicios en que se atiende la salud mental, se trabaja con prácticas que buscan mejorar y mantener el bienestar emocional. Pero en el trajín cotidiano esas prácticas en ocasiones se desatienden, se abandonan o no se consideran como parte de la vida diaria. Cuando se busca y se recibe servicio periódicamente y se considera la intervención de salud mental como parte de una revisión integral, ayudamos a reforzar estrategias que al ponerse en práctica consistentemente ayudan al desarrollo del bienestar emocional. La terapia ofrece el espacio de observar y lidiar con las situaciones de manera diferente, ayudando a enfrentar y manejar el malestar emocional.
¿Cuáles pueden ser las consecuencias de no buscar ayuda de salud mental?
No buscar ayuda, o esperar demasiado para solicitar servicio comúnmente tiene como consecuencia mayor severidad de los síntomas. Cuando hay una situación que nos preocupa al punto que afecta nuestra funcionalidad, porque ocupa demasiado tiempo en nuestra mente e interfiere con los compromisos diarios, implica que los síntomas que se están sufriendo son significativos. En la evaluación de nuestra situación individual buscar ayuda implica reconocer que necesitamos apoyo, para evitar que la condición nos afecte al grado de que nuestro funcionamiento se vea comprometido.
¿Debo tener diagnóstico de alguna condición mental para buscar ayuda psicológica periódicamente?
Un diagnóstico ofrece guía en la intervención terapéutica, sin embargo, antes de llegar a ese punto, hay una serie de síntomas que se pueden identificar y atender. Los profesionales de la salud atendemos las situaciones que afectan la estabilidad mental a lo largo de un periodo de tiempo determinado. Cuando se obtiene un diagnóstico, implica que la persona ha estado experimentando síntomas severos por un periodo de tiempo significativo, y esto ha alterado su capacidad de funcionar. Ante este cuadro, usualmente se recomienda un programa de psicoterapia basado en modelos cuya efectividad se ha demostrado con la evidencia científica.
¿Cómo puede ayudarme la terapia psicológica en el manejo de situaciones comunes de estrés y ansiedad?
Los espacios de terapia psicológica nos ofrecen la oportunidad de ser escuchados. En esos espacios no se emite juicio por lo que pienses, expreses o la decisión o decisiones que hayas tomado. La terapia ofrece un espacio del desarrollo de una vida saludable, en la que se aprenden y se ponen en práctica destrezas para lidiar con las emociones. La psicoterapia presenta modelos de acercamiento a corto y largo plazo. Estos modelos están científicamente validados y establecen metas a lograr como resultado de las intervenciones. Por lo tanto, la psicoterapia busca que la persona tenga una mejor comprensión de las situaciones de vida diaria, de los conflictos y a mejorar tras eventos de trauma. Cuando se logran los objetivos de la terapia se desarrollan comportamientos más saludables y se aprende a manifestar una expresión de emociones positiva.
